Como en casa

Mi blog vio la luz, el día 18 de octubre de 2012... Y vuelve a renacer hoy 13 de febrero de 2023. Espero que cuando me visiten se sientan como en casa, con la confianza de opinar sobre cualquier post, artículo o reseña. Se aceptan comentarios, correcciones y críticas siempre que sean escritas con educación, espero alimentarme de ustedes y viceversa. Creo en el continuo aprendizaje... aprendamos juntos.

sábado, 9 de marzo de 2013

CARTA DE AMOR por Elizabeth

Con esta carta participé en un concurso... nunca llegue a recibir respuesta, ni siquiera sé si recibieron mi email. Pero como ya paso la fecha del mismo... decidí compartirla en mi blog.


*****







Ronda, 14 de Febrero de 2013

A mi amado Julián…
Hoy, en el día del amor, te escribo esta carta para recordar aquella tarde de otoño de hace más de diez años, en que nuestras miradas y nuestros corazones quedaron unidos para siempre.
Después de todo lo vivido, aun hoy te recuerdo caminado hacia mí, con ese andar sensualmente varonil. Yo paseaba cerca de la plaza de Toros con mi amiga Elena y tú hacías lo mismo con unos amigos, sin perder de vista a todas las chicas que pasaban por allí. No pude dejar de fijarme en ti, tan alto y atractivo, andabas con soltura, derrochando encanto y regalando sonrisas y piropos a cuanta mujer pasaba por tu lado.
Aún no me habías visto. Elena me instaba a que nos marcháramos antes de que tú y tus amigos se percataran de nuestra presencia, pero yo no quería irme sin que me miraras. Aunque sólo fuera una vez, quería sentir tu mirada sobre mí.
Por eso, seguí mi camino sin desviarme ni un momento de la dirección que mi corazón me indicaba. Cuando apenas nos separaban unos pasos para cruzarnos, de repente; notaste mi presencia y dirigiste tu mirada hacia mí…  Sentí como me recorrían tus ojos desde mis pies hasta mis cabellos. Después, lentamente tu mirada fue bajando hasta encontrarse con la mía y, en ese instante, algo mágico sucedió entre los dos. Nos acercamos muy despacio, no me lisonjeaste como a las demás, sólo me mirabas con el corazón en tus ojos, y en ese momento, supimos sin lugar a dudas, que estábamos predestinados a amarnos.
Hoy, en el día en que pocos tienen la suerte de recordar al amor, solo me cabe decirte Julián, que esa tarde de otoño, fue la mejor tarde de mi vida, porque encontré tu mirada inolvidable, porque te encontré a ti.
Con amor, María.



No hay comentarios:

Publicar un comentario